Luego de la presión ejercida por el primer ministro británico, Boris Johnson, y por el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, quienes pidieron condenar la invasión que desplegó Rusia sobre Ucrania, el jefe de fiscales de la Corte Penal Internacional (CPI) decidió iniciar una investigación por crímenes de guerra y de lesa humanidad contra el presidente ruso Vladimir Putin.
“Hace unos momentos, notifiqué a la presidencia de la Corte Penal Internacional mi decisión de proceder de inmediato con investigaciones activas”, aseguró Karim Khan, el jefe de fiscales de la CPI, en un comunicado.
El pasado 28 de febrero, el funcionario de origen británico había manifestado su intención de abrir una investigación por crímenes “cometidos por cualquiera de las partes en todo el territorio de Ucrania”.
De esta manera, con el apoyo de una solicitud de 39 países, la fiscalía de la CPI comenzará la pesquisa en Ucrania.
La Corte Penal Internacional, que tiene su sede en la ciudad de La Haya, en los Países Bajos, es un tribunal de justicia internacional permanente cuya misión es juzgar a las personas acusadas de cometer crímenes de genocidio, guerra, agresión y lesa humanidad.
Los procedimientos propuestos por la fiscalía de la CPI necesitan habitualmente del visto bueno de una sala de cuestiones preliminares compuesta por tres jueces. No obstante, la solicitud presentada por 39 países, entre los que se encuentran España, Francia, Alemania, Reino Unido, Portugal, Italia, Canadá y Australia, entre otros, elimina el requisito de la autorización de los magistrados y permite la fiscalía de la Corte Penal Internacional comenzar automáticamente con las investigaciones.